Un año más, Marmolejo se ha lanzado a engalanar sus calles y a trabajar por mantener la tradición del Corpus aportando lo mejor de cada casa. Se ha conseguido hacer del recorrido de la procesión un auténtico escenario de artesanía, manualidades y mucho trabajo.
Los vecinos se han volcado con la parroquia para hacer de este día un acontecimiento histórico más, quedando guardado en las cámaras de marmolejeños y visitantes.
En esta ocasión, el recorrido ha subido desde el centro hacia el barrio de Belén y ha servido de preámbulo para la Celebración de la Fiesta de la Espiga, el próximo 26 de junio.
Las alfombras dibujadas en el suelo y rellenas de colorido, junto a telas, macetas, jarrones, pergaminos y mucho buen hacer por parte de la organización y los vecinos garantiza la continuidad de una tradición que se va haciendo grande cada año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario